Pie cavo . Texto copiado de "CirugíaArticular.com".
¿Qué es el pie cavo?:
El pie cavo es una deformidad del pie en la que la bóveda plantar se ve aumentada y por lo tanto la zona de apoyo del pie
esta disminuida. El dolor suele derivar de la presión aumentada en estas zonas de apoyo.
El pie cavo es un pie que presenta una bóveda plantar excesiva, al estar aumentada la bóveda ciertas zonas que
normalmente están en contacto con el suelo en estos pies no lo están, y por lo tanto las cargas se concentran en una
menor superficie que en un pie normal. Las zonas sobrecargadas son la cabeza de los metatarsianos y el talón.
Causas:
Las causas pueden ser hereditarias o debidas a enfermedades
neurológicas o musculares (poliomielitis, espina bífida o ataxia de
Friedrich). También ciertas enfermedades reumáticas pueden evolucionar
produciendo un pie cavo.
Síntomas:
En muchos casos cuando la deformidad no es muy aparente no produce
dolor. En estos pies es más frecuente la aparición de metatarsalgias (dolor
debajo de la cabeza de los metatarsianos), callosidades en los puntos de
apoyo excesivo (cabeza de metatarsianos y talón). Con el tiempo pueden
aparecer deformidades en los dedos (dedo en garra) que a su vez
produzcan dolor al rozar con el calzado. La alteración en la transmisión de
las cargas puede facilitar la aparición de artrosis y de tendinitis que también
producirán dolor en diferentes puntos del pie.
Tratamiento:
Además de las medidas habituales de evitar las sobrecargas excesivas (obesidad) y el uso de calzado adecuado. Se
podrán usar plantillas con las que se pretende aumentar el área de apoyo del pie y/o descargar las zonas de mayor
presión (como la cabeza de los metatarsianos). Las tendinitis y el dolor agudo se podrán tratar con antiinflamatorios y
analgésicos de manera episódica. Finalmente la cirugía solo se realizara en los raros casos de pies con grandes
deformidades y dolor intratable con las medidas conservadoras. Con la cirugía se intentará restablecer la forma normal del
pie cortando y realineando ciertos huesos que participan en la deformidad o bien fusionando las articulaciones que han
evolucionado a una artrosis. En los casos en los que se produzcan dedos en garra y estos sean el origen del dolor se
podrán reorientar mediante la cirugía.
Nota:
Esta página intenta informar a los pacientes y a los familiares de estos sobre las dolencias más frecuentes del aparato
locomotor, en ningún momento pretendemos sustituir la labor del médico. Como especialistas aconsejamos que siempre
acuda a su médico general, rehabilitador o reumatólogo en caso de padecer alguna dolencia, así como el asesoramiento
por parte de su traumatólogo y cirujano ortopédico para decidir si la cirugía constituye el tratamiento indicado para su
enfermedad.