49- ATAXIA CEREBELOSA AGUDA. Medicina y familia.

La ataxia cerebelosa aguda ocurre más comúnmente en niños entre los 2 y 6 años de edad, el comienzo es brusco y la evolución de los síntomas es rápida, en la mitad de los casos hay una enfermedad previa con fiebre y síntomas gastrointestinales, respiratorios o exantemáticos en las tres semanas previas el comienzo de la ataxia.

Las infecciones virales asociadas con este síndrome incluyen la varicela, sarampión, paperas, rubéola, infecciones por echo-virus, poliomielitis, influenza y mononucleosis infecciosa. En algunos casos, infecciones bacterianas tales como la escarlatina y la salmonelosis han sido incriminadas.

Los síntomas incluyen marcha tambaleante, incapacidad de sentarse sin apoyo o de alcanzar objetos, hipotonía y temblor de las extremidades, movimientos anormales de los ojos, habla lenta y arrastrada, irritabilidad, y vómitos sin signos de presión intracraneal aumentada.

El diagnóstico diferencial debe hacerse con los síndromes cerebelares agudos debidos a anticonvulsivantes (fenitoina, fenobarbital o primidona), la intoxicación por plomo; en casos muy raros la ataxia cerebelar puede ser el signo de presentación de meningitis bacteriana aguda, vasculitis, encefalomielitis, o esclerosis múltiple.

El tratamiento es sintomático. El pronóstico es bueno con recuperación sin secuelas del 80% a 90% de los niños en 6 a 8 semanas. En el resto de los casos los síntomas pueden persistir por algunos meses o años y la recuperación puede ser incompleta.